Con color, creatividad y mucha alegría, los Espacios Municipales de Primera Infancia (EMPI) celebraron el Día del Niño en cada una de sus sedes, llevando adelante una propuesta única con la temática “Infancias Literarias”. Las jornadas fueron organizadas por las docentes y equipos de trabajo de cada espacio, con el acompañamiento de la Dirección de Educación, y contaron con la participación activa de las familias.

La propuesta comenzó a gestarse en las semanas previas, cuando los niños trabajaron distintos cuentos en sus salas. A partir de esas historias, se prepararon juegos alusivos que, en el día del festejo, permitieron compartir experiencias y actividades entre todas las salas. El espíritu fue recrear el mundo de los libros y la imaginación, integrando a todos en un clima festivo y participativo.

Las celebraciones también se destacaron por su cuidada ambientación: cada EMPI lució decoraciones elaboradas en talleres previos junto a las familias, donde se confeccionaron carteles, murales, adornos y elementos alusivos a los cuentos elegidos. Esta tarea previa permitió que la fiesta tuviera un sello propio, hecho a mano y con la colaboración de toda la comunidad educativa.

La asesora de la Dirección de Educación, Bertha Baldi, expresó: “Quiero felicitar de corazón a todas las docentes de los EMPI por la hermosa celebración del Día del Niño que organizaron. Sé el trabajo, la dedicación y la creatividad que ponen en cada detalle, y eso se nota en la alegría de los chicos. Gracias por su predisposición y por dar siempre lo mejor para que ellos vivan un día tan especial”.

Un momento especial de la jornada fue la entrega de remeras que, además de ser un obsequio recordatorio de la fecha, constituyen el nuevo uniforme para todos los niños y para el personal docente de cada espacio. Este gesto busca reforzar el sentido de pertenencia, identidad y unidad en cada EMPI, integrando a todos bajo una misma imagen institucional.

Con estas actividades, los EMPI reafirmaron su compromiso de ofrecer espacios de aprendizaje, juego y contención, fortaleciendo el vínculo entre la educación inicial, la cultura y la familia, y celebrando la infancia como una etapa única que merece ser vivida con alegría, imaginación y amor.