En el marco del evento “Invierno Mágico”, organizado en la ciudad como propuesta recreativa para las vacaciones de invierno, el Área de Accesibilidad e Inclusión participó activamente durante los tres días con una acción concreta de inclusión: la instalación de una Cabina Sensorial destinada a personas que requieren un entorno controlado para regularse.

Este espacio fue especialmente diseñado para reducir la sobreestimulación que pueden generar los eventos masivos, ofreciendo un ambiente tranquilo, seguro y adaptado. La cabina permitió que personas con condiciones como TEA (Trastorno del Espectro Autista), hipersensibilidad sensorial u otras características similares, puedan disfrutar de la muestra sin sentirse sobrepasadas.

La propuesta se basó en el uso de recursos multisensoriales suaves y elementos que promueven la calma, como iluminación tenue, texturas agradables y sonidos relajantes. Estos elementos están pensados para facilitar la regulación emocional y disminuir los niveles de ansiedad, garantizando así una experiencia más amena y accesible para todas las personas.

Desde el Área de Accesibilidad destacaron que la instalación de este tipo de dispositivos forma parte de una estrategia más amplia de construcción de espacios públicos más inclusivos, que contemplen la diversidad de experiencias y necesidades. 

La experiencia fue bien recibida por familias y visitantes, que valoraron positivamente la existencia de este espacio de resguardo. Se reafirma así el compromiso de seguir incorporando herramientas que garanticen la plena participación de todas las personas en la vida cultural, social y comunitaria de la ciudad.